Normas de 300
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Normas de 300
Los camaradas se defienden mutuamente. Si alguien te está causando problemas se las verá con todos. ¡Ojo, esto no es carta blanca para hacer lo que nos dé la gana! Si yo ataco a alguien, y la víctima se defiende, no puedo ir diciéndole a los camaradas: ¡Vamos a darle una paliza entre todos! Si yo provoco el problema tengo que atenerme a las consecuencias, y no parece muy ético aquello de “yo te puedo atacar todo lo que me dé la gana y tú no te puedes defender, porque si lo intentas te machacamos”. Está prohibido saquear a miembros de otras alianzas, excepto si son de un solo miembro. Si a pesar de esto lo haces, allá tú.
Los vecinos de un mismo valle deben llevarse bien. El desarrollo de los valles es prioritario para crecer, y es difícil hacerlo si andas a tarascadas con tus vecinos. Los miembros de 300 tienen la obligación de ir a la cabeza en las donaciones, y los rácanos amigos de vivir de las donaciones ajenas no tienen sitio ni entre nosotros ni en nuestros valles.
Las disputas entre compañeros de alianza las resuelve el Consejo de 300. El uso de la violencia entre espartiatas, incluso verbal, es el delito más grave que se puede cometer, y les puede suponer a los infractores la expulsión y el posterior ataque de la alianza.
Nos pone ciegos ver el mensaje de “fulanito de tal ha decidido abandonar la alianza” por sorpresa. No cuesta tanto trabajo escribir una nota de despedida explicando los motivos por los que te vas, y el que lo hace así merece un trato especial por parte de 300, que siempre lo considerarán como un antiguo compañero que ayudó a la alianza a crecer.
Si lo anterior nos pone ciegos, el “Mensaje a todos los miembros de la alianza” nos hace ver sangre, nos produce impulsos homicidas. Cualquiera puede mandar un mensaje de presentación cuando entra en la alianza, pero después se acabó. El comercio, los avisos de ataques, las preguntas sobre las misiones, casi todo tiene su sitio y su forma de hacerse: a través del foro, del cónsul y del gobernador de tu territorio o preguntándole a un compañero cercano para que te oriente. Cualquier cosa menos el puñetero mensajito a todo el mundo; su uso se sanciona severamente.
Entre nosotros o con antiguos compañeros comerciamos a precios de coste: 3 de madera por 2 de cualquier otra cosa, y todo lo demás 1 x 1. Si lo pagamos, 8 monedas por la madera y 12 por todo lo demás. Esto no quiere decir que dos jugadores no puedan llegar a acuerdos especiales; si los dos están de acuerdo en aplicarse otras condiciones entre sí, estupendo.
La disciplina es el pilar más importante de 300. Todo el mundo puede hacer propuestas y abrir debates en el foro, y estos serán estudiados en el Consejo. Nuestro funcionamiento es democrático, pero una vez tomada una decisión las órdenes se cumplen sin discusión. El interés de la alianza está por encima de los intereses de cualquier espartiata, sea cual sea su cargo.
Es obligatorio registrarse y utilizar el foro de 300, que es la columna vertebral de nuestra nación. Recuerda que está prohibido utilizar los mensajes masivos a toda la alianza; por lo tanto, el foro te es imprescindible para crecer y desarrollarte, y para afrontar los problemas que puedan surgirte. La prohibición de usar los mensajes a toda la alianza no es gratuita. Ya sabéis que sólo podemos ver los últimos 25 mensajes, y que si entran más los anteriores se pierden. El gobierno utiliza ese sistema de forma excepcional para asuntos realmente importantes, que deben llegar a todos los miembros. Cuando se ha abusado de él han surgido situaciones que han puesto en peligro de desaparición a toda la alianza.
Ningún miembro de 300 podrá pertenecer a Quo Vadis ni a ninguna otra organización o banda paralela a las alianzas dedicada a la piratería, la prestación de servicios de mercenarios o cualquier otra actividad que suponga una amenaza para los jugadores de Hernán. Cualquier miembro de estas asociaciones que solicite la entrada en 300 deberá abandonar previamente dichas actividades. La prohibición afecta a las actividades organizadas, y no a las operaciones de saqueo desarrolladas normalmente en el juego.
Los vecinos de un mismo valle deben llevarse bien. El desarrollo de los valles es prioritario para crecer, y es difícil hacerlo si andas a tarascadas con tus vecinos. Los miembros de 300 tienen la obligación de ir a la cabeza en las donaciones, y los rácanos amigos de vivir de las donaciones ajenas no tienen sitio ni entre nosotros ni en nuestros valles.
Las disputas entre compañeros de alianza las resuelve el Consejo de 300. El uso de la violencia entre espartiatas, incluso verbal, es el delito más grave que se puede cometer, y les puede suponer a los infractores la expulsión y el posterior ataque de la alianza.
Nos pone ciegos ver el mensaje de “fulanito de tal ha decidido abandonar la alianza” por sorpresa. No cuesta tanto trabajo escribir una nota de despedida explicando los motivos por los que te vas, y el que lo hace así merece un trato especial por parte de 300, que siempre lo considerarán como un antiguo compañero que ayudó a la alianza a crecer.
Si lo anterior nos pone ciegos, el “Mensaje a todos los miembros de la alianza” nos hace ver sangre, nos produce impulsos homicidas. Cualquiera puede mandar un mensaje de presentación cuando entra en la alianza, pero después se acabó. El comercio, los avisos de ataques, las preguntas sobre las misiones, casi todo tiene su sitio y su forma de hacerse: a través del foro, del cónsul y del gobernador de tu territorio o preguntándole a un compañero cercano para que te oriente. Cualquier cosa menos el puñetero mensajito a todo el mundo; su uso se sanciona severamente.
Entre nosotros o con antiguos compañeros comerciamos a precios de coste: 3 de madera por 2 de cualquier otra cosa, y todo lo demás 1 x 1. Si lo pagamos, 8 monedas por la madera y 12 por todo lo demás. Esto no quiere decir que dos jugadores no puedan llegar a acuerdos especiales; si los dos están de acuerdo en aplicarse otras condiciones entre sí, estupendo.
La disciplina es el pilar más importante de 300. Todo el mundo puede hacer propuestas y abrir debates en el foro, y estos serán estudiados en el Consejo. Nuestro funcionamiento es democrático, pero una vez tomada una decisión las órdenes se cumplen sin discusión. El interés de la alianza está por encima de los intereses de cualquier espartiata, sea cual sea su cargo.
Es obligatorio registrarse y utilizar el foro de 300, que es la columna vertebral de nuestra nación. Recuerda que está prohibido utilizar los mensajes masivos a toda la alianza; por lo tanto, el foro te es imprescindible para crecer y desarrollarte, y para afrontar los problemas que puedan surgirte. La prohibición de usar los mensajes a toda la alianza no es gratuita. Ya sabéis que sólo podemos ver los últimos 25 mensajes, y que si entran más los anteriores se pierden. El gobierno utiliza ese sistema de forma excepcional para asuntos realmente importantes, que deben llegar a todos los miembros. Cuando se ha abusado de él han surgido situaciones que han puesto en peligro de desaparición a toda la alianza.
Ningún miembro de 300 podrá pertenecer a Quo Vadis ni a ninguna otra organización o banda paralela a las alianzas dedicada a la piratería, la prestación de servicios de mercenarios o cualquier otra actividad que suponga una amenaza para los jugadores de Hernán. Cualquier miembro de estas asociaciones que solicite la entrada en 300 deberá abandonar previamente dichas actividades. La prohibición afecta a las actividades organizadas, y no a las operaciones de saqueo desarrolladas normalmente en el juego.
Nemsis- Geronte
- Mensajes : 206
Fecha de inscripción : 29/01/2011
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